Según el portal ART+Internet, desde 2011, el gasto en obras de arte ha repuntado de manera constante, pasando de 24,8 millones a una cifra que rondó los 34,6 millones de euros en el transcurso del pasado ejercicio.
Las obras de arte son uno de los pocos activos cuya cotización no se devalúa –en general- con el tiempo y no presentan la volatilidad propia de otro tipo de productos (como, por ejemplo, la renta variable). Las obras de los artistas conocidos y no contemporáneos suelen revalorizarse a largo plazo.
Adicionalmente, se observa un interés creciente, entre los coleccionistas de arte, por las obras del periodo de posguerra. En 2013, se batió una nueva marca con la venta de un lienzo del autor checo Mikuláš Medek.
Del mismo modo, durante el pasado curso, el número de obras de arte subastadas por un precio superior a 38.500 euros ascendió a 130 piezas. Asimismo, se vendió un total de 785 esculturas, antigüedades y cuadros fueron por un valor por encima de 3.850 euros.
Fuente: The Prague Post
